Opinión

Los suspirantes… Rotundo fracaso del PRI en las extraordinarias

Morelia, Michoacán, 09 de diciembre de 2015.- El PRI fracasó estrepitosamente en su intento por ganar las elecciones extraordinarias en el Distrito XII de Hidalgo y en el municipio de Sahuayo.

De acuerdo con el Programa de Resultados electorales Preliminares (PREP), con el 100 por ciento de las casillas computadas, en la elección de Hidalgo, el priísta Salvador Peña Ramírez quedó ni más ni menos que 23.09 puntos por debajo de la candidata común del PRD y Nueva Alianza, Jeovana Alcántar Baca.

En tanto, en Sahuayo, también con el conteo al 100 por ciento en el PREP, la ventaja del candidato común del PAN, del PRD y de Nueva Alianza, Rodrigo Sánchez Zepeda, sobre el abanderado del PRI, del PVEM y del PT, Ricardo Sánchez Gálvez, fue de 21.64 puntos.

Cuando en una elección extraordinaria vemos cifras tan apabullantes, tan contundentes, como las de este domingo 6 de diciembre, entonces se hace necesario reflexionar sobre la viabilidad de este tipo de comicios.

En ambos casos el partido que con argumentos legaloides orilló a la anulación de los procesos electorales ordinarios volvió a perder, pero ahora con una abrumadora desventaja, lo que me hace pensar en las injusticias que se pudieron haber cometido desde el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).

No hay que olvidar que el órgano jurisdiccional retrasó la toma de protesta de Jeovana Alcántar como diputada local.

Ahora, con unos meses de retraso en comparación con los legisladores que entraron en funciones el 15 de septiembre, la ex dirigente municipal del PRD en Ciudad Hidalgo ya no será legisladora del sol azteca, sino de Nueva Alianza, con base en los acuerdos para la candidatura común, y seguramente con la intención del perredismo de asegurar la curul plurinominal de Cecilia Lazo de la Vega, cuya diputación quedó en suspenso hasta conocer los resultados del Distrito de Hidalgo.

Por lo que se refiere a la elección de Sahuayo, volvió a ganar el PAN, pero ahora en candidatura común con PRD y Nueva Alianza, y de manera mucho más contundente, lo que me lleva a pensar que se pudo haber cometido una injusticia con el candidato que originalmente había ganado la elección, Armando Tejeda Cid, quien de hecho fue inhabilitado por el Tribunal para contender en los comicios extraordinarios.

Tomando en consideración lo anterior, yo urgiría en primer lugar a clarificar la legislación de tal modo que se reduzca al mínimo el margen para los errores de apreciación por parte de los tribunales electorales.

Además, hay quienes plantean que las elecciones extraordinarias se realicen con recursos de los partidos políticos infractores. Yo diría más bien que este tipo de comicios no deberían existir, y sí, más bien, descalificar de la elección ordinaria a los partidos o candidatos infractores, con lo cual los ganadores serían los partidos y candidatos que más votos obtuvieran de manera lícita, así fueran sólo mil o menos de 10. ¿Usted qué opina?

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